Los mitos del ayuno

Mitos del ayuno

Entendemos mal el ayuno: No es dieta, no es castigo y no te va a matar.

Los mitos del ayuno

Ayuno: acto de abstenerse total o parcialmente de comer o beber. Se da por diferentes motivos: religiosos/espirituales, formas de protesta (las famosas huelgas de hambre) y por razones de salud.

Algunos ayunos espirituales:

Judíos (Yom Kippur)

Musulmanes (Ramadán)

Cristianos (Cuaresma)

En todos, al ayuno se le relaciona con un acto de purificación y limpieza.

Mitos del ayuno

1.No es una dieta

Perder peso es un efecto secundario de recuperar tu salud y entrar en conciencia de lo que verdaderamente necesita tu cuerpo físico.

Tu cuerpo no se adelgaza por sí solo más que lo que necesita.

2. No te vas a morir por no comer

Tienes combustible y energía suficiente para sobrevivir ya que las memorias celulares de supervivencia se activan y se procede a proteger las células sanas.

Hay estudios que demuestran que una persona con cáncer en ayunando los efectos secundarios son menores con la quimio e incluso una dosis mucho menor es mucho más efectiva.

Según los investigadores del Instituto del Corazón del Centro Médico Intermountain, en Utah, Estados Unidos, el ayuno no sólo reduce el riesgo de enfermedades del corazón y diabetes, sino que también provoca cambios positivos importantes en los niveles de colesterol de una persona.

Según el mismo estudio, las personas que ayunan un día al mes tienen 39% menos riesgo de sufrir enfermedad de las arterias coronarias, una de las principales causas de muerte tanto de hombres como mujeres

3. No vas a perder depósitos minerales

De hecho, es más fácil que los pierdas comiendo mal.

4. No vas a pasar hambre

5. Las crisis curativas son signos de que el cuerpo está depurándose

Beneficios comprobados del ayuno:

- Limpia y depura a fondo la corriente sanguínea (tras las primeras 24 h).

- Restablece el pH adecuado en sangre.

- Refuerza las defensas (y recupera el buen funcionamiento de los sistemas de alarma)

- Facilita la eliminación de grasa (aumentando el glucagón)

- Controla los lípidos en sangre (reduciendo el nivel de triglicéridos)

- Contribuye en el mantenimiento/aumento de la musculatura gracias al aumento de la hormona de crecimiento (que también ayuda a posponer el envejecimiento y es notable tras 24 horas de ayuno)

- Mejora la capacidad de autocontrol (superando esa “necesidad mental” que hemos desarrollado a comer cada poco tiempo, aportando sensación de autoconfianza y satisfacción) y puede ser una estupenda herramienta contra el nerviosismo y la ansiedad.Créditos/marthadebayle.com