Crónica de un fraude anunciado
ESTE REFERÉNDUM CARECE DE LAS CONDICIONES PARA GARANTIZAR SU VALIDEZ:
2.- La ONPE, que debe ser neutral, está haciendo campaña por el SÍ mediante personal capacitado para enseñar a la población cómo votar.
3.- La prensa, que debe ser neutral y promotora del debate democrático, en su mayoría está haciendo campaña por el SÍ y cerrando puertas al NO, por el financiamiento del Estado.
4.- Gran parte de la prensa está monopolizada en violación del artículo 62 de la Constitución que lo prohíbe.
5.- Las encuestadoras, que deben ser neutrales, hacen encuestas contratadas por el Gobierno; no merecen credibilidad.
Este concierto de falsedad ha creado una falsa imagen de legitimidad del presidente Vizcarra para dirigir la lucha anticorrupción, cuando tiene 43 denuncias penales por actos de corrupción como gobernador de Moquegua y otras más sobre corrupción en este gobierno, como el de Chinchero, y de su encubrimiento concertado con desactivación delictiva de la Contraloría.
Un presidente que debiera estar procesado por delito de traición a la Patria, al estar sometiendo al Perú a intereses extranjeros, como él mismo lo ha reconocido ante la ONU al dar cuenta del cumplimiento del plan de colonización del Gobierno Mundial a través de la agenda 2030, y como comprobamos en las políticas de transculturización ideológica de género y dispositivos legales dirigidos a someter a la nación a los patrones de la “gobernanza mundial”.
Nos está imponiendo un referéndum digitado por el grupo de poder que está detrás y se dirige a tomar control de la administración de justicia, para montar lo que llaman “gobernanza judicial”, una dictadura en que el Poder Ejecutivo controla al Judicial y mediante sentencias impone lo que es ley o no para la nación, y asegura su confirmación en los tribunales internacionales controlados por el Gobierno Mundial.
Podrá Vizcarra conseguir el SÍ a su fraudulento referéndum con este concierto delictivo; pero nos tendrá a millones de peruanos en las calles y en las plazas, y no abdicaremos del deber ciudadano de defender a nuestra Patria, en ejercicio del derecho a la insurgencia que reconoce el artículo 46 de la Constitución, hasta que él renuncie o sea derrocado en cumplimiento de los artículos 117 y 114 de la Constitución y se convoquen nuevas elecciones.
Créditos/expreso.com.pe/Beatriz Mejía Mori
ESTE REFERÉNDUM CARECE DE LAS CONDICIONES PARA GARANTIZAR SU VALIDEZ:
1.- El presidente Vizcarra, que debiera ser neutral, ha hecho campaña electoral por el SÍ con recursos del Estado.
2.- La ONPE, que debe ser neutral, está haciendo campaña por el SÍ mediante personal capacitado para enseñar a la población cómo votar.
3.- La prensa, que debe ser neutral y promotora del debate democrático, en su mayoría está haciendo campaña por el SÍ y cerrando puertas al NO, por el financiamiento del Estado.
4.- Gran parte de la prensa está monopolizada en violación del artículo 62 de la Constitución que lo prohíbe.
5.- Las encuestadoras, que deben ser neutrales, hacen encuestas contratadas por el Gobierno; no merecen credibilidad.
Este concierto de falsedad ha creado una falsa imagen de legitimidad del presidente Vizcarra para dirigir la lucha anticorrupción, cuando tiene 43 denuncias penales por actos de corrupción como gobernador de Moquegua y otras más sobre corrupción en este gobierno, como el de Chinchero, y de su encubrimiento concertado con desactivación delictiva de la Contraloría.
Un presidente que debiera estar procesado por delito de traición a la Patria, al estar sometiendo al Perú a intereses extranjeros, como él mismo lo ha reconocido ante la ONU al dar cuenta del cumplimiento del plan de colonización del Gobierno Mundial a través de la agenda 2030, y como comprobamos en las políticas de transculturización ideológica de género y dispositivos legales dirigidos a someter a la nación a los patrones de la “gobernanza mundial”.
Nos está imponiendo un referéndum digitado por el grupo de poder que está detrás y se dirige a tomar control de la administración de justicia, para montar lo que llaman “gobernanza judicial”, una dictadura en que el Poder Ejecutivo controla al Judicial y mediante sentencias impone lo que es ley o no para la nación, y asegura su confirmación en los tribunales internacionales controlados por el Gobierno Mundial.
Podrá Vizcarra conseguir el SÍ a su fraudulento referéndum con este concierto delictivo; pero nos tendrá a millones de peruanos en las calles y en las plazas, y no abdicaremos del deber ciudadano de defender a nuestra Patria, en ejercicio del derecho a la insurgencia que reconoce el artículo 46 de la Constitución, hasta que él renuncie o sea derrocado en cumplimiento de los artículos 117 y 114 de la Constitución y se convoquen nuevas elecciones.
Créditos/expreso.com.pe/Beatriz Mejía Mori
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