¿Y si la muerte, la gran temida, solo fuera una ilusión de nuestros sentidos? ¿Y si no existiese? ¿Y si estuviéramos ante “la gran mentira”?
Así lo apostilla el reconocido científico Dr Robert Lanza en una noticia no exenta de polémicas.
El biocentrismo pretende reivindicar el valor primordial de la vida, el Dr Lanza también afirma que existen infinidad de universos con diferentes variaciones que tienen lugar al mismo tiempo.
La noticia a la que nos referimos en esta entrada es:
La muerte, tal y como la concebimos, no existe, sólo es una ilusión
La Dra Elisabeth Kübler-Ross ya le puso a la muerte un adjetivo calificativo esperanzador, comparándola con “un amanecer”.
Esta escritora suizo-estadounidense fue médica, psiquiatra y una de las mayores expertas mundiales en los estudios de la muerte, los cuidados paliativos que reciben las personas moribundas y el acto de morir.
En sus estudios describe las diferentes fases que atraviesa la persona según va llegando su muerte. Esto convierte su obra en una verdadera ayuda a pacientes y familiares que se encuentran en esta triste situación.
La doctora Kübler-Ross falleció el 24 de agosto de 2004.
En su libro, “La Muerte: Un Amanecer” encontramos unas pequeñas reflexiones de las que destacamos:
- Es necesario que sepáis que si os acercáis al lecho de vuestro padre o madre moribundos, aunque estén en coma profundo, os oyen todo lo que decís y en ningún caso es tarde decir: «lo siento», «perdóname», «gracias», «te amo», o alguna otra cosa que queráis decirles. Nunca es demasiado tarde para expresar estas palabras, aunque sea después de la muerte, ya que las personas fallecidas siguen oyendo. Incluso en ese mismo momento podéis arreglar asuntos pendientes, aunque estos se remonten a 10 o 20 años atrás.
- Cuando se abandona, el cuerpo se encuentra en una existencia en la cual el tiempo ya no cuenta, o simplemente ya no hay tiempo, del mismo modo que tampoco podría hablarse de espacio y de distancia tal y como lo entendemos puesto que en ese caso se trata de nociones terrenales.
- Ningún ser humano puede morir solo, y no únicamente porque el muerto pueda visitar a cualquiera, sino también porque a la gente que ha muerto antes que vosotros y a la que amasteis os espera siempre.
- La muerte no es más que un pasaje hacia otra forma de vida. Se han abandonado las formas físicas terrenales porque ya no se las necesita.
- Cada uno tiene el espacio celestial que se imagina y para mí evidentemente el cielo es Suiza, con sus montañas y flores silvestres (…)
- Una luz brilla al final, esa luz es blanca, de una claridad absoluta, y a medida que os aproximáis a ella os sentís llenos del amor más grande, indescriptible e incondicional que os podáis imaginar.
- Después, cuando se muere, ya no es posible volver al cuerpo terrestre, pero de cualquier manera, cuando se ha visto la luz, ya no se quiere volver. Frente a esa luz, os dais cuenta por primera vez de lo que el hombre hubiera podido ser.
- La muerte no es más que el abandono del cuerpo físico, de la misma manera que la mariposa deja su capullo de seda.
- La muerte es el paso a un nuevo estado de conciencia en el que se continua experimentando, viendo, oyendo, comprendiendo, riendo, y en el que se tiene posibilidad de continuar creciendo.
- El cuerpo físico no es más que una casa, un templo, el capullo de seda en el que vivimos durante un cierto tiempo hasta la transición que llamamos muerte. Cuando llega la muerte abandonamos el capullo de seda y somos libres como una mariposa.
Créditos/masalladenuestrasvidas
Así lo apostilla el reconocido científico Dr Robert Lanza en una noticia no exenta de polémicas.
Dr Robert Lanza, es un destacado médico, científico y profesor que dedica su investigación a la medicina regenerativa. Ha desarrollado la teoría del biocentrismo, una “nueva teoría del Universo”, que propone utilizar todos los conocimientos que la humanidad ha adquirido durante los últimos siglos.
El biocentrismo pretende reivindicar el valor primordial de la vida, el Dr Lanza también afirma que existen infinidad de universos con diferentes variaciones que tienen lugar al mismo tiempo.
La noticia a la que nos referimos en esta entrada es:
La muerte, tal y como la concebimos, no existe, sólo es una ilusión
Esta escritora suizo-estadounidense fue médica, psiquiatra y una de las mayores expertas mundiales en los estudios de la muerte, los cuidados paliativos que reciben las personas moribundas y el acto de morir.
En sus estudios describe las diferentes fases que atraviesa la persona según va llegando su muerte. Esto convierte su obra en una verdadera ayuda a pacientes y familiares que se encuentran en esta triste situación.
La doctora Kübler-Ross falleció el 24 de agosto de 2004.
En su libro, “La Muerte: Un Amanecer” encontramos unas pequeñas reflexiones de las que destacamos:
- Es necesario que sepáis que si os acercáis al lecho de vuestro padre o madre moribundos, aunque estén en coma profundo, os oyen todo lo que decís y en ningún caso es tarde decir: «lo siento», «perdóname», «gracias», «te amo», o alguna otra cosa que queráis decirles. Nunca es demasiado tarde para expresar estas palabras, aunque sea después de la muerte, ya que las personas fallecidas siguen oyendo. Incluso en ese mismo momento podéis arreglar asuntos pendientes, aunque estos se remonten a 10 o 20 años atrás.
- Cuando se abandona, el cuerpo se encuentra en una existencia en la cual el tiempo ya no cuenta, o simplemente ya no hay tiempo, del mismo modo que tampoco podría hablarse de espacio y de distancia tal y como lo entendemos puesto que en ese caso se trata de nociones terrenales.
- Ningún ser humano puede morir solo, y no únicamente porque el muerto pueda visitar a cualquiera, sino también porque a la gente que ha muerto antes que vosotros y a la que amasteis os espera siempre.
- La muerte no es más que un pasaje hacia otra forma de vida. Se han abandonado las formas físicas terrenales porque ya no se las necesita.
- Cada uno tiene el espacio celestial que se imagina y para mí evidentemente el cielo es Suiza, con sus montañas y flores silvestres (…)
- Una luz brilla al final, esa luz es blanca, de una claridad absoluta, y a medida que os aproximáis a ella os sentís llenos del amor más grande, indescriptible e incondicional que os podáis imaginar.
- Después, cuando se muere, ya no es posible volver al cuerpo terrestre, pero de cualquier manera, cuando se ha visto la luz, ya no se quiere volver. Frente a esa luz, os dais cuenta por primera vez de lo que el hombre hubiera podido ser.
- La muerte no es más que el abandono del cuerpo físico, de la misma manera que la mariposa deja su capullo de seda.
- La muerte es el paso a un nuevo estado de conciencia en el que se continua experimentando, viendo, oyendo, comprendiendo, riendo, y en el que se tiene posibilidad de continuar creciendo.
- El cuerpo físico no es más que una casa, un templo, el capullo de seda en el que vivimos durante un cierto tiempo hasta la transición que llamamos muerte. Cuando llega la muerte abandonamos el capullo de seda y somos libres como una mariposa.
Créditos/masalladenuestrasvidas
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