domingo, diciembre 31

Fuegos artificiales son un calvario para autistas

Los fuegos artificiales afectan a los niños con autismo

Fiestas de fin de año como La Navidad pueden representar un verdadero calvario para toda persona con Trastorno de Espectro Autista (TEA). Especialista brinda recomendaciones para evitarles momentos de estrés.
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Fuegos artificiales son un calvario para autistas

Con la llegada de la Navidad y Año Nuevo, la mayoría de las familias se  preparan  para  festejar con un estallido de incontables fuegos artificiales que iluminan el cielo de bellos colores. Pero algunos, este festival de luces puede significar un calvario, donde  cada estruendo implica un daño y un verdadero sufrimiento, hablamos de los niños que viven bajo la condición autista.

Yrene Hernández de Salazar, consultora  en el centro psicopedagógico Aletheia Internacional, menciona que estos sucesos se transforman en los más estresantes del año, pues la sensibilidad auditiva es uno de los síntomas más frecuentes de personas con Trastorno de Espectro Autista (TEA). Ellos perciben los sonidos con una mayor intensidad, bastante diferente a lo que otros pueden estar escuchando. Por ello, los ruidos sorpresivos y fuertes, como los que emiten los fuegos artificiales, pueden resultar intolerables.

“(Frente a los pirotécnicos) ellos pueden reaccionar con irritabilidad, miedo excesivo, agresividad y ansiedad, lo que los lleva finalmente a un episodio de crisis, pasado el evento es bastante probable que se mantengan atentos a un nuevo sonido aunque la época ya haya pasado y crear así un estado de ansiedad difícil de manejar y de erradicar”, indicó Hernández.

Recomendaciones del especialista
Es importante anticiparle este tipo de actividades al niño o niña, haciendo mención a lo positivo del evento, si es posible que puedan identificar el sonido con las luces que emite. 

Acostar al niño antes de medianoche, ya que, estando dormido, hay menos probabilidades de que escuche los sonidos.

Ubicarlo en un lugar de la casa en donde el ruido de los explosivos no llegue tan fuerte. Unos tapones para oídos o, audífonos con alguna canción que lo tranquilice, puede ser de gran ayuda.
Créditos/larepublica.pe

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